Premisa Mayor
“Eje
Central”
“HORA DE LA
RECONSTRUCCIÓN NACIONAL”
Por: Ricardo Eguía Valderrama
Nov-25-2012
¡Urge! ¡Urge buena política!
No más abusos, manipulación ni
transgresión impune de la ley…
El poder al servicio del derecho, de
la solución a los graves problemas a punto de hacer eclosión y de manera
especial por el respeto irrestricto a los derechos humanos…
No más mediocridad organizada,
tampoco los “protocolos” del escapismo retórico ni de cifras falsas…un alto al
abuso cotidiano del poder con diarias erupciones de ponzoña en su versión más
rapaz…
Premura para dar vuelta a la sucia
hoja de la vacuidad, el simplismo, la insolencia repetitiva como basamento
sexenal de la estolidez, la desafección a la ley, la incongruencia, la frágil
reverberación de la miopía para reincidir con necedad y tozudez en los mismos
errores y para permanecer en el eterno fiasco a la honestidad, a la
inteligencia y a las esperanzas ciudadanas burladas con esa apoteosis del
sicópata cuya cabeza tiene una significación puramente ornamental…
En los
estertores, la caducidad anhelada por todo un pueblo y el ocaso de un régimen
que se empeñó entre el acíbar de la inseguridad, el vinagre de la violencia
cuajada de primitivismo y vulgaridad extrema, la rancidez ultra conservadora,
delirantes empeños por destruir el pais olvidándose de gobernar para las
mayorías, entregado con guión estandarizado al cuatismo, la improvisación, la insolencia,
la arrogancia, la descoordinación amnésica, extraviada y que habiendo hecho
jirones las Instituciones fluye raudo a las alcantarillas de la historia,
México se acerca a la postergada hora de la reconstrucción nacional.
Una de las ideas “consentidas” de esa
mayoría de mexicanos excluidos, salvo cuando se les convida a votar, ha sido
desde hace tiempo que exista una lucha cierta, coherente, congruente y
eficiente contra la corrupción desde el gobierno aprovechándose camarillas
recicladas de habitar temporalmente en las cumbres del poder…
Los “sueños” del cambio de los
mexicanos de hoy siguen siendo el de la transparencia en el ejercicio del acto
de autoridad, de toda la función gubernamental, de las prácticas legislativas y
obviamente con urgencia, en la Procuración e impartición de Justicia pronta y
expedita.
De no ser porque en este país la
realidad supera a la ficción, muchos de los excesos sexenales de las dos
últimas administraciones (la una ignara y la otra bestial) pasarían por obras
de terror, literatura o humor negro y pesadillas donde los que nos deberían
proteger y servir han sido nuestros más desalmados enemigos maniobrando impunes
desde las perversas “tiranías de la pequeñez”, el bullying politiquero y la
corrupción como metodología lépera e insaciable…
Historiales negros que en otras
latitudes serían no solo parodias increíbles sino movimientos políticos
telúricos con caídas de gobiernos y juicios, escandalosos procesos, sentencias
y prisión para los “neandertales” y homínidos enfundados en la casaca
inexpugnable con la que se forra la mal llamada “clase política” amoral,
enviciada y que en connivencia con los poderes fácticos devoran al país en un
festín interminable.
Por ese repetido infierno dantesco y
sin consecuencias para los demonios, se nos dimensiona como un pueblo sin
memoria, sumiso, crédulo, proclive a la vejación e indiferente ante el robo, la
estafa y el latrocinio…Yo no creo que el pueblo de México tenga esos infamantes
atributos, pero si estoy convencido que cada día se reduce la tolerancia y la
mecha del hartazgo se acorta ante el abuso de su nobleza.
A mi juicio, el cambio fundamental
que la población exige consiste en esgrimir menos excusas, menos pretextos,
menos evasivas para aplicar la ley y evitar
la impunidad , éste si un auténtico “cáncer social”.
El advenimiento de un nuevo gobierno
concita esperanzas pero trae aparejadas exigencias como el del combate a la
pobreza y a la miseria, mismo que siendo toral, no debe seguirse haciendo de
ello simple apología clientelar o que la
SEDESOL siga repartiendo migajas
(solo 0.20 cvs de c/peso presupuestado llega a solo algunos de los que aparecen
en sus padrones) y ya debe ser responsabilidad compartida con la Secretaría de
Economía y el Gabinete Social bien coordinadas todas las áreas eliminando la
improvisación, así como la dispersión de esfuerzos y de recursos.
Lo anterior teniendo como horizonte
que la pobreza obedece a razones estructurales que no deben perpetuarse.
De nada servirá repartir eternamente
dinero si el “crecimiento del PIB por
persona sigue estancado o a la baja…El “CEESP”
(Centro de estudios económicos del sector privado) nos informa que por 30
años en México ese índice solo ha sido de 0.67%, en Chile fue del 4.3%, en
Corea del Sur 6.6% en la India del 9% y en China del 12% lo que le ha permitido
sacar a millones de la pobreza estigmatizante y pesado lastre de cualquier
país…
Según el “Banco Mundial” la pobreza
extrema se incrementó en los últimos diez años de un 12.8% al 18.9%, la pobreza
patrimonial de un 40% al 53% y el salario se deterioró un 15% (Más la inflación
alimentaria que rebasa el 12%) 20% más que en el 2006 no tienen acceso a
servicios de salud y el 33% tampoco a un empleo digno, así como nueve millones
de jóvenes permanecen sin acceso a empleo ni a educación.
Todo ello en medio de un engendro
tributario: ISR; Impuesto
empresarial tasa única (IETU); IVA; ISAN (autos nuevos); Impuesto sobre productos y servicios de
gasolinas y diesel; Impuesto sobre bebidas contenido alcohólico; Impuesto sobre
productos y consumo de cerveza y bebidas refrescantes; Impuestos sobre tabacos;
Impuesto sobre juegos, sorteos y apuestas; Impuesto sobre rendimientos
petroleros; Impuesto sobre bebidas energizantes; Impuesto tenencia vehículos;
Impuesto al Comercio Exterior; Impuestos accesorios; Impuesto sobre redes de
telecomunicaciones e Impuesto sobre depósitos en efectivo “IDE” con lo cual el gobierno recaudó un billón doscientos noventa y
cuatro mil millones de pesos, pero el “gasto
público” un barril sin fondo, desvío de fondos, subejercicios y mayor “gasto corriente inútil”, mientras que
la deuda pública interna y externa se
duplicó…
El próximo gobierno deberá eficientar
y transparentar el gasto público para superar las rémoras de la inseguridad pública, procuración de
justicia, prevención de delitos, más y mejor educación, salud pública real (no
solo cifras y padrones de millones que están inscritos en el Seguro Popular y
de nada les sirve pues la infraestructura actual está sobresaturada, sin camas,
sin médicos, sin medicinas)… ¡pura
demagogia!!!
Después del primero de Diciembre
próximo, sin duda se corregirá el rumbo de este país y se iniciará una vigorosa
Reconstrucción Nacional…
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