Premisa Mayor
“Eje
Central”
“SIN TITUBEOS”
Por: Ricardo Eguía Valderrama
Dic-02-2012
“En el principio está la clave del final” afirmaba categórico Nietzche el peso
pesado del Determinismo…
Lo que quiere decir que no es lo mismo salir sosegado a los
medios, luego citar de hinojos frente a la puerta de toriles al primer “miura”
de la difícil alternativa y darle el famoso capotazo conocido como “El
imposible” de manera templada y pinturera al “toro embravecido”…que lo opuesto
de hace seis años: Es haber entrado al coso por la puerta de atrás, trémulo,
sudoroso, jadeante y con las rodillas temblando como maracas para luego, entre
la rechifla del respetable ser arrollado y revolcado por el “burel”…
No es lo mismo “ganar” con trastupijes, vilezas, abusos de
poder y muy sospechosos y nimios 268 mil votos negándose al recuento, que ganar
con más de tres millones de votos y recontarse miles de casillas confirmándose
de manera irrecusable la voluntad mayoritaria de la población a favor del Lic.
Enrique Peña Nieto.
En el mismo tenor de la frase de Nietzche, tampoco es lo
mismo empezar un sexenio promisorio con un gabinete de expertos y
experimentados Secretarios de Estado, que por el contrario, el sexenio de
oprobio recién sepultado en los albañales de la historia haber iniciado y
concluido tozudamente manteniendo una gamberra cuota de improvisados y de
palurdos cuya única divisa nada circunstancial, era ser cuates del falsario que
se regodeaba al estar rodeado de enanos y simples lacayos, aunque al país se lo
llevaran los pingos…
A pesar de recibir un
país derruido, confrontado y sumido en la peor violencia, el Lic. Enrique Peña
Nieto refrendó su convicción de político sensato, responsable y riguroso en lo
que concierne a la ortodoxia política con respeto y cuidado de las formas
evitando caer en la confrontación o el recuento de los incontables daños
infligidos al país…
Como el orto después de
la espesa, lóbrega y larga noche panista, de manera juiciosa, esmerada y
generosa prefirió dar vuelta a la hoja, vio al pasado ignominioso como estéril
pérdida de tiempo y de manera pragmática superó con madurez la tentación, de
plausible y entendible por cierto, de hacer cuando menos una breve relatoría de
la barbarie, la desgracia, los agravios a la población y el desastre que le
heredan…
Prefirió de manera encomiable, sin enconos ni discordias que
demostrado está conducen de ningún lado a ninguna parte, ver al futuro
inmediato de este país ofreciendo de manera congruente una “democracia de
resultados” obligándose a ejercer el poder con respeto al Estado de Derecho, en
constante diálogo con la ciudadanía y sometimiento a los controles
Constitucionales…
Consciente de que nada podrá devolver la vida a las miles de
víctimas inocentes, ni confortarán con simples promesas o excusas a los miles
de huérfanos, de viudas, de parientes y de familias agobiadas por la “guerra”,
se comprometió a desistirse de la amañada controversia Constitucional que su
antecesor mezquino interpuso y permitir con ello la vigencia plena de la
siempre perfectible “Ley de víctimas”.
Sería prolijo repetir los cinco ejes y las trece decisiones
trascendentales que con vigor enunció en su primer discurso como Presidente en
funciones, pero es justo y además procede remarcar su enfática apuesta a los jóvenes, a la educación de calidad, la urgencia
insoslayable de restablecer la paz, reconstruir el país asolado por la
criminalidad proponiéndose y autoimponiéndose la obligación de prevenir los
delitos de alto impacto atajando la descoordinación en la Procuración de
Justicia y las policías para combatir la
impunidad como premisas fundamentales…
Hemos visto a un Presidente sereno, no arrebatado,
incluyente, no caprichoso que pretenda jugar con el destino nacional pues
demuestra que la “SEDESOL” no será
más reducto del clientelismo partidista y el nombramiento de Mondragón (ex
–jefe de la Policía de Ebrard) implica que no usará la Policía Federal contra
la oposición.
Ratificó y es encomiable no se arredre ante la mezquindad de
algunos Senadores que se oponen a la Reforma a la Administración Pública
Federal y que sigue firme la desaparición de la nefasta e inoperante Secretaría
de Seguridad Pública Federal por ser un rotundo fiasco y un costoso desastre
plagado de corrupción escandalosa y rampante.
Empieza muy bien este
sexenio cuando sin reservas, contundentemente se obliga con los pobres,
combatir la desigualdad con inversión pública en infraestructura productiva que
influya en el empleo, la competitividad y el fortalecimiento insoslayable del
mercado interno, más
aún cuando el entorno económico global entraña peligros de “estampida de
capitales golondrinos” por los rescates bancarios y el trasvase ilógico,
absurdo de miles de millones a una élite parasitaria injusta, cruel e
insaciable que está aplicando una ecuación imposible de sostener por la
barbarie que implica para millones de familias despojadas de su patrimonio, de
su trabajo y todavía tiene que soportar recortes en el gasto social y más
impuestos a los que menos tienen.
¡El Lic. Enrique Peña
Nieto tomó el mando sin titubeos, enunció un programa razonable, viable e
indispensable para revertir las inercias negativas y demostró ser capaz de
conducir al país por nuevos derroteros del eficiencia y responsabilidad pues el no adujo como el torpe
“Elliot Ness” necrofílico que lo “puso ahí Dios”, sino el voto popular al que
cada minuto y en cada decisión sabrá corresponderle con tino, seriedad y congruencia, ajeno al voluntarismo autoritario!
2 comentarios:
Es verdad, tal y como lo refirió el pasado 6 de diciembre de 2012 el blog de “El Universal” denominado VIRTUALIS (referido a la sociedad digital), que un nuevo gobernante tiene 2 ventajas: la autoridad moral del inicio (¿o mejor dicho “el beneficio de la duda”?) y el arrojo con el que puede hacerse una promesa que no cuesta (sobre todo, considerando que dicho arrojo está apoyado en el hecho de que las decisiones respecto al tema, no estarán únicamente del lado del Poder Ejecutivo). Ahora bien, ¿qué hay respecto al hecho de que los gobernantes no arrancan en ceros, sino con un cúmulo de compromisos no sólo políticos, sino también pactados con empresarios cuyo peso obliga a adecuar las decisiones de gobierno a sus intereses particulares? (basta ver que la revista Forbes acaba de dar a conocer su lista de los hombres más poderosos del planeta, y Carlos Slim se ubica muy por encima de EPN).
Es verdad, tal y como lo refirió el pasado 6 de diciembre de 2012 el blog de “El Universal” denominado VIRTUALIS (referido a la sociedad digital), que un nuevo gobernante tiene 2 ventajas: la autoridad moral del inicio (¿o mejor dicho “el beneficio de la duda”?) y el arrojo con el que puede hacerse una promesa que no cuesta (sobre todo, considerando que dicho arrojo está apoyado en el hecho de que las decisiones respecto al tema, no estarán únicamente del lado del Poder Ejecutivo). Ahora bien, ¿qué hay respecto al hecho de que los gobernantes no arrancan en ceros, sino con un cúmulo de compromisos no sólo políticos, sino también pactados con empresarios cuyo peso obliga a adecuar las decisiones de gobierno a sus intereses particulares? (basta ver que la revista Forbes acaba de dar a conocer su lista de los hombres más poderosos del planeta, y Carlos Slim se ubica muy por encima de EPN).
Ana Lilia Velasco Chi - M1G49
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