Premisa Mayor
“Eje
Central”
“OPORTUNIDAD HISTÓRICA”
Por: Ricardo Eguía Valderrama
Sept.-30-2012
Es una obviedad decir que cualquiera puede ser mejor Presidente
que Calderón con solo cambiar un poco en lo medular…
Pero nadie y menos el Lic.
Peña Nieto creo aspire a distinguirse por matices y poquedades solo para
rebasar con minucias imperceptibles el actual sexenio corrosivo que sin
parquedades “socializó el mal”.
Creo que el Presidente
electo intentará romper paradigmas desde el primer día de su gobierno para
distinguirse, con perdón de los taurófilos, de la timidez del “maleta” que se
refugió en el “burladero” del militarismo para rehuir las embestidas de los
seis bureles (años) a pesar de que en el 2006 se desgañitaba pidiendo el capote
desde el palco de los villamelones azules, metiéndose al ruedo por la puerta de
atrás para hacer el ridículo, al demostrarse que no tenía los arrestos
suficientes como “primer espada”.
En la campaña y durante esos días de borrascas
post-electorales el pueblo de México apreció en el Lic. Peña Nieto ecuanimidad
y respeto a la ley, a los tiempos así como a las resoluciones de los Tribunales
y desde ahí se hace ostensible una gran diferencia con la rijosidad e
intemperancia calderoniana…
Soportó por igual los embates de izquierdas y derechas con
serenidad y supo refrendar la tentación por devolver golpes, diatribas,
injurias, falsedad y tosquedades lo cual denota sensatez, temple, entereza y
buen juicio que lo revela diferente al Calderón impulsivo, camorrero, necio y
trompicado a quien los “seis bureles” le propinaron tremendas revolcadas y
profundas cornadas saliendo ya del ruedo para fortuna de México y entre la
rechifla, cojinazos, gritos escatológicos y trompetillas del respetable.
Igual creo podrá diferenciarse el Presidente electo del
saliente desde la acertada conformación de su gabinete con expertos para que
implique un macizo armazón preparado
para dar soluciones al país y que no sea, como hoy, disparatado, costoso y
estéril reducto del “cuatismo” o de la repulsiva improvisación, para muchos
y me incluyo, la peor forma de corrupción ya que no solo raya en la bufonada y
el atraco a la Nación sino que se asestan daños irreversibles a la buena marcha
de un país atrasado solo por los caprichos indecentes de un individuo palurdo
empecinado en hacer ostensible una hegemonía que se colgó seis años, no del
aire solamente, sino de necedades y ordinariez reluctante.
El pueblo mexicano espera no ver más “botulismo” oficial ni
personajes impresentables como Molinar
Horcasitas, ni Chertoriski que sin ser médico fue impuesto en la
Secretaría de Salud o el caso del jamelgo Ferrari
que siendo licenciado en Derecho Canónico tantos daños le asestó a la industria
nacional; tampoco gente anodina como un tal Jordy Herrera, un ladino y rapaz Suárez Coppel o una inextricable señora Kessel que hicieron trizas al sector energético, pilar fundamental
de la magra economía nacional petrolizada.
Espera México, que con Peña Nieto se salga ya del “valle de
los ilusos”, se dejen atrás los parajes de la negligencia, la desolación, la
violencia devastadora, el desparpajo, el agandalle, la división, los abusos a
los derechos humanos, la indiferencia con las víctimas inocentes, la soberbia
gubernamental, la ruina y la corrupción desquiciada del sistema de Procuración
de Justicia, los pésimos niveles en la educación, la inercia reactiva para
evadir la prevención de los delitos, el continuismo y la impunidad de la
abusiva rapacidad oficial, el asco y la
vergüenza de que $427 mil millones de dólares (dinero de los mexicanos) esté
hoy en “paraísos fiscales” que representan dos veces el total de la deuda
externa triplicada en este sexenio y que según la firma Mc Kinsey & Co al reunir datos del
“Banco Mundial” la “OCDE”, el “FMI” y el Banco de pagos Internacional del 2006 al 2012 empresas y
empresarios mexicanos transfirieron al exterior $29.645 millones de dólares y
además invirtieron en el extranjero (no aquí donde se enriquecen) $42,798
millones de dólares lo que suman $72,442 millones de dólares y nulo compromiso
con este país, más las transferencias multimillonarias a sus matrices
extranjeras por parte de los Bancos que tienen todo, menos que sean mexicanos y
que con el contratismo en “Pemex”,
la “CFE”, las minas extranjeras
etc., etc., se “fugaron” del país $145,000 millones de dólares (tres millones
de dólares cada hora) lo cual descuadra
cualquier modelo para que en México existan condiciones para el crecimiento
económico.
Se percibe el afán impositivo, de cerrazón y autoritarismo de
Calderón pretendiendo imponerle su agenda nefasta al sucesor para esconder y no
admitir que se equivocó en la “guerra” fracasada contra el narcotráfico…quiere
justificarse y evadir su atroz irresponsabilidad en su machacar represivo
frenético, alocado, sin pausa y con graves costos en vidas humanas,
desapariciones forzadas, inestabilidad e inseguridad total que tiene postrada a
la economía nacional y despilfarros presupuestales sin resultado positivo
alguno.
Los mexicanos queremos suponer que el Lic. Peña Nieto
recepcionó en campaña la queja y el agravio generalizado por esa guerra
fracasada y sus atrocidades cometidas en su nombre o con dicho pretexto para
encubrir el rabioso pillaje, carnicerías, feroz crueldad de las corporaciones
que debían darnos protección pero que en su lugar nutrió su corrupción
inveterada y pútrida sicopatía para arrollar, robar, violar el domicilio,
imputar con criminales protegidos como testigos delitos inexistentes y ejercer
la necrofilia con fruición de antropoides.
“Del caos nacen las estrellas y el orden cósmico decía
Nietzche y por ende aspira México que el
Lic. Peña Nieto de esa batalla desigual que de un lado se producen drogas, es
paso de ellas, es expulsor por ser un
país pobre de mano de obra barata, desata la mortandad (limpieza social) se
trastoca el orden público, se amontonan cadáveres, aumentan las víctimas
inocentes; en cambio en Estados Unidos la demanda y el consumo de drogas
aumenta, se lava dinero y se recicla ese dinero sucio que las drogas producen,
no se hace nada para disminuir el flujo de armas, no se combaten las causas de
esa violencia criminal que allá tiene sus raíces, luego entonces procede un
golpe de timón y un acurdo conjunto que modifique ese desequilibrio repudiable,
irracional y anclado en el continuismo de la injusticia, la grosería y la
humillación de nuestro país que es visto en el orbe como santuario de las
mafias, coto de caza para asesinos y paraíso de la criminalidad…¡El peor de los
mundos ya que nadie le concede mérito alguno al ominoso hecho de haber
acumulado setenta mil muertos sin investigar y por ende totalmente impunes!!!
En fin es larga la lista de trapacerías, yerros, abusos,
excesos, tortuosidades y trapacerías de Calderón, mucho también lo que se tiene
que cambiar y poco el espacio por hoy para esa larga “carta a Santa Claus” que
el pueblo mexicano le escribe al Lic. Peña Nieto partiendo de la premisa que
una buena política, además de valor, decisión y voluntad de servir, implica
compromiso, conducción y liderazgo para
superar inercias…
Desglosando a la inversa la anotación de Albert Camus podamos decir al fin del sexenio por iniciar que “La
política y la suerte de los hombres no está hecha de carencia de ideales y de
grandeza…sino que los que tienen alguna grandeza pueden descollar también en la política”.
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