domingo, 3 de febrero de 2013


Premisa Mayor
“Eje Central”

“PRUDENCIA ANTE LA TRAGEDIA”

Por: Ricardo Eguía Valderrama
Febrero-03-2013
¡
La verdad triunfa por sí misma, la mentira necesita siempre de complicidades!!!
Así parafraseando a Epicteto a todos consta el hecho descarnado de una explosión en el edificio sede de la empresa (paraestatal) que más ingresos genera a nuestro país…
Esa explosión causó muy lamentables pérdidas humanas irreparables, lesionados, tristeza, luto, conmoción, alarma y natural saturación, por esa infausta noticia, en todos los medios…

Como procede en una tragedia de esas dimensiones la prioridad gubernamental se centró en la atención a las víctimas y en la coordinación de los grupos de rescate para la búsqueda de posibles personas atrapadas bajo los escombros…La solidaridad humana por encima de todo.

Ante la magnitud del siniestro y las repercusiones del percance se evitó la sicosis colectiva atajándose oportunamente rumores, especulaciones, dudas, confusiones y conjeturas con un muy buen “manejo de la crisis” donde prevaleció la atingencia, presteza y eficacia con la indispensable apertura a la información y apego a la verdad.

Nadie puede poner en duda que el Lic. Peña Nieto y su equipo de colaboradores demostró capacidad de reacción, entereza, sensibilidad y oficio para encarar la tragedia…Ahora se inician las pesquisas, la búsqueda acuciosa de la verdad con el conjunto de expertos y peritos para llegar a la conclusión científica, bien fundada, solvente y confiable partiendo de la base de que no se habrá de soslayar ninguna línea de investigación…

Hasta aquí los hechos y frente al acertijo nada de trenzar historias que luego se caen, pero no especular no implica dejar de pensar y por ende los peritajes no podrán ser manejados al estilo de Hitchcok “el maestro del suspenso” donde los cinéfilos gozan de tensión de la trama, pues en esta tragedia no caben posiciones dubitativas, medias verdades, largo impasse ni mucho menos teorías de videntes ya que saber y mostrar a la sociedad la verdad evitará se repita el hecho, se aplique la ley y se haga Justicia.

Peritajes y conclusiones bien soportadas evitarán no solo suspicacias, trascendidos o pervertidas hipótesis desde el anonimato, sino que ya sea por negligencia, accidente o atentado nada quede impune; pues es la impunidad la que agravia mas a la población y además la impunidad alienta la reincidencia y estimula la peligrosa y más sórdida emulación…

Esto es, si al final del día los fundados peritajes determinan negligencia basada en el “pésimo historial de seguridad” que ha padecido PEMEX inveteradamente, mismo que se agudizó con la subcontratación, las outsourcing y la nefasta desidia de empresas privadas que simulan la prestación de servicios a la paraestatal, deberán señalarse clara y contundentemente a los responsables e imponerles castigo ejemplar…

Si no se puede descartar ninguna hipótesis ni desechar el atentado a-priori pues existen fanáticos extremistas que no vacilan en utilizar la violencia criminal, sería irresponsable ocultarlo a la opinión pública pues ello implicaría dejar a la población en estado de indefensión frente a ese tremendo agravio…No debe temerse si fuera el caso, a las palabras “terrorismo” o “sabotaje” ya que igual serían actos criminales con diferencia destinatario simplemente…a lo que habrá que temer es al soslayo, la evasiva y a la ambigüedad ante delitos de esa magnitud pues volvemos al tema ominoso de la impunidad, esa si el verdadero cáncer de cualquier país.

“PEMEX” tiene, aunque sea decir lo obvio, importancia estratégica para la Nación y decirle la verdad a la población por oprobiosa y espeluznante que sea es apostarle a la claridad, a la diafanidad, al orden; nunca más al hermetismo, al encriptamiento de la información ni a la oscuridad deliberada que se vuelven estanques de aguas turbias que sugerirían misterio, connivencia, cobardía o complicidades que terminarían debilitando la credibilidad que tiene el nuevo gobierno.

A nadie escapa la obsolescencia y falta de mantenimiento a las instalaciones de “PEMEX” fruto del régimen fiscal de expolio, auténtico pillaje hacendario y saqueo al que se le somete para financiar casi el 40% del Gasto Público Federal.

Es larga la lista de incidentes o accidentes en los que nunca se fincaron responsabilidades…A manera de apretada síntesis recordemos en 1979 el derrame del pozo Ixtoc I; en 1992 la explosión dantesca en las calles de Guadalajara con cientos de muertos; antes la terrible explosión de San Juan Ixhuatepec conocido como San Juanico; la explosión en 2001 en la refinería de Tula Hidalgo; el incendio (2002) en el complejo petroquímico de “Pajaritos”; en 2003 la explosión de ductos en Veracruz; incendio en instalaciones de Santiago Tuxtla Veracruz (2004) en 2005 explosión del gasoducto de 48 pulgadas de Dos Bocas Veracruz; incendio del buque tanque en la terminal “Pajaritos” (2005) explosión en Cárdenas Tabasco (2007) fuga de aceite en Kab Campeche (2009) en 2010 explosión fuga y muertos en refinería de Cadereyta Nuevo León; en 2011 explosión del ducto en San Martín Texmelucan con 30 muertos y en septiembre del 2012 explosión e incendio con otra mortandad de más de 30 personas en instalaciones de PEMEX-gas en Reynosa Tamaulipas (fuente: El economista)…ahora en el edificio emblemático y sede de la paraestatal ¿Qué más se está esperando para actuar con todo rigor?

Nada fácil será volver a patear el bote pa´delante cuando la población sabe que independientemente del seguro con cobertura total por $400 millones de dólares entre “INBURSA” y “PEMEX” (vence en junio del 2013) en los dos últimos sexenios la paraestatal ha sido desmantelada, despojada, endeudada y asfixiada financieramente a pesar de que el costo de producción del barril es de solo seis dólares y se vende a cien dólares en promedio y que con Fox “PEMEX” antes de impuestos de pillaje generó (2000-2006) cuatro billones cien mil millones de pesos y en el nefasto sexenio de Calderón el genocida, generó seis billones quinientos mil millones de pesos ($500 mil millones de dólares) equivalentes al 50% del PIB esto es 170% más que con Fox y ni un dólar para el mantenimiento, menos para prospección, producción ni refinación.

Prefirió Calderón y Suárez Coppel, socio de “SACYR”, invertir $1,800 millones de dólares  con pérdidas millonarias en las acciones de la española “REPSOL” y $2 mil millones de dólares en los astilleros de Galicia para “hoteles flotantes”.

Como dijera el insigne Catón: “Hágame el refabrón cavor”.




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