Saturday, March 6, 2010

Afirmativa ficta

e iniciativa preferente quiere el Calderonato…

Por: Lic. Ricardo Eguia Valderrama

Marzo-06-2010

“…tened cuidado, no vaya a ser que nuestras

estatuas y falsos ídolos nos aplasten…”

F. Nietzsche

Daniel Maní, activista político italiano del siglo XIX además de un significativo legado como pensador propició la acuñación del término “maniqueísmo” para dejarlo como sinónimo de dogmatismo, de fanatismo, de intolerancia y de rigidez en la forma de pensar…

Para los maniqueos (y eso todos lo saben, pero para luego contextualizarlo), las cosas son buenas o malas, es negativo o positivo algo, es blanco o es negro o estás conmigo o en contra y no hay matices, ni términos medios, ni otras interpretaciones, mucho menos mejores opiniones…

Habida cuenta de ello y para no caen en el simple maniqueísmo debo aceptar que las tres iniciativas de Reforma Política enviadas al Senado de la Republica por mi partido el PRI, por el PRD e incluso, el “decálogo” Calderoniano tienen con todo y sus omisiones especificas algo de virtuosas toda vez que en mayor o menor medida tienden a devolverle a la ciudadanía los derechos que le reconoce el artículo 39 Constitucional…

Ahora bien, antes de entrar al análisis de las coincidencias entre esas tres iniciativas, resulta trágico para el pueblo mexicano que ninguna de ellas hace alusión ni siquiera marginal o tangencialmente a una exigencia casi generalizada de la población para instaurar la Revocación del Mandato como eje vertebrador de las demás reformas propuestas que se quedaron cortas ante la sociedad mexicana como acreedora legitimada para insistir en cambios profundos, modificaciones de fondo no solo superficiales, selectivas o cosméticas que ya no tolera una población profundamente resentida con las élites en el poder y su pésimo manejo de las recurrentes crisis económicas y la violenta crisis de inseguridad que se enseñorea inmunda por toda la Nación…

Pocos entienden, yo entre ellos, la extraña coincidencia en las tres Iniciativas de Reforma Política para omitir, para soslayar, para ignorar el reclamo social de la mayoría nacional que ante los enormes pasivos de la clase política que no asume su responsabilidad en el rotundo fracaso de la economía y su pésimo manejo en la enorme crisis de violencia e inseguridad; la sociedad harta de la repetición de los mismos programas, de las mismas políticas públicas fallidas; hastiada esa sociedad de los nulos resultados en materia de supervisión del “gasto público” excesivo y dilapidado, saqueado impunemente sin responsabilidad presidencial e impunidad total de sus Secretarios ineptos; una sociedad que ha sido hundida sistemáticamente por las devaluaciones repetidas, la inflación exultante derivada de las políticas gubernamentales que encarecen los energéticos sin control y las tarifas eléctricas abusivas; una sociedad aplastada por el desempleo masivo, los salarios deprimidos, el retraso educativo, acrecentadas deficiencias en materia de salud pública y de pobreza extrema generalizada y multiplicada impunemente en este sexenio exige esa sociedad la “Revocación del Mandato” como la Reforma fundamental que evite el reciclamiento de viejos vicios, prácticas cupulares sucias y la impunidad sexenal de los funcionarios del más alto nivel que vulneran y comprometen con menosprecio el presente y futuro de este país…

Esta coincidencia de las tres Iniciativas es no solo grave y decepcionante para la mayoría ciudadana sino que se le pretende agraviar eternamente propugnando ahora la reelección de Diputados y Presidentes Municipales que de suyo son ya eternos saltimbanquis de un puesto de elección a otro y que se quedarán apoltronados en ellos no como fruto de la voluntad popular como falazmente se pregona, ni tampoco para exigirles cuentas lo cual podría hacerse de inmediato, sino como resultado de los mismos arreglos cupulares tradicionales, pragmatismos groseros de índole electorera y de las decisiones que se sustentan en el grupismo, en el amiguismo y ahora en boga desfachatada también del mas abigarrado nepotismo…

Sigo pensando y ya lo he expresado en diversos foros que la reelección es una regresión histórica muy delicada no solo por el ominoso mensaje que envía de un verdadero salto al pasado dictatorial sino porque en una democracia tan incipiente, con rápida pérdida de la confianza ciudadana, gran insatisfacción social, carencia de libertades ciudadanas para opinar y aislamiento de los partidos políticos que han conducido a un rechazo a los procesos electorales que se traducen en un setenta por ciento de abstencionismo, votos nulos y en blanco la reelección implicaría mas inercias, rigidización de procesos internos en los partidos y reducción de la permeabilidad política para que sigan los mismos…

Estando este país detenido literalmente por elecciones cada año y con grandes costos presupuestales en perjuicio de programas sociales y/o de infraestructura, creo factible y más lúcida la propuesta de ampliar el término Constitucional para Diputados y Presidentes Municipales…

Si por otra parte la única forma de ser representantes populares es solo y definitivamente el voto libre, secreto y directo del pueblo, deben desaparecer los plurinominales que representan solamente las cuentas repartibles entre las cúpulas partidistas e implica una “democracia” abandonada al autoritarismo gerencial en los partidos que es precisamente lo que ha alejado a la población de las urnas al percibir un continuismo sin compromisos con la ciudadanía, una burlona repetición de los mismos apellidos y sucesores en línea consanguínea directa que no asumen sus responsabilidades ni las consecuencias de sus errores pues responden solamente a los intereses de los que los imponen cíclicamente…

Sería muy difícil en un espacio tan reducido abarcar todo el análisis de las Iniciativas de Reforma Política, pero asumo el compromiso de revisar de manera consecutiva la figura de la Iniciativa ciudadana, candidaturas independientes, la segunda vuelta, la reducción en las Cámaras de la Iniciativa Calderoniana y de ella tomé como principio de este ejercicio la Iniciativa preferente para presentar dos Reformas Constitucionales por periodo ordinario de sesiones que deberán dictaminarse y votarse en dicho periodo a-fortiori y en caso de no dictaminar y peor aún, se vote en cualquier sentido se considerará aprobada lo que constituye la afirmativa ficta…

Aislada esta Reforma Calderoniana implicaría un sometimiento y una sustitución del Poder Legislativo, pero hace sentido si se cohonesta con la ratificación por el Congreso de la Unión de los secretarios de Estado, la moción de censura para removerlos, la supresión del “veto de bolsillo” presidencial y la Legislación precisa para que el Presidente de la República sea responsable ante la Ley por sus acciones y omisiones.

Estas Reformas permitirán un real y funcional equilibrio de Poderes que en México y sobre todo en los últimos dos sexenios han llevado a no solo la prevalencia del Ejecutivo y no precisamente para permitir el avance del país, sino para estancarlo y para degradar la Institución Presidencial que por encima de la Ley actúa por caprichos, latidas y puntadas lamentables propias de un país bananero…

Basta ya de tanta estulticia política, pongámosle un hasta aquí a las elites gubernamentales enloquecidas, confrontadas y plagadas de soberbia, confusión y partidarismos a ultranza que están destrozando al país…

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