“PAQUETE para festejar en casa el bicentenario”

PREMISA MAYOR
“Eje Central”

“PAQUETE para festejar en casa el bicentenario”
Por: Lic. Ricardo Eguía Valderrama
Sept. 15-2010

Supongo que en todo el país se repartió en los domicilios una bandera pequeña, un impreso con las estrofas del Himno Nacional y encartada venía una “invitación” tajante en cartulina roja para no asistir, ni de relajo a los festejos del Bicentenario y en letra menuda una advertencia “evítenos la pena de negarle el acceso a la plaza pública, cupo completo” y con letra aún más pequeña “soldados y marinos vestidos de civil adiestrados para vitorear”…
Para cualquier mediano entendedor estaba muy claro el mensaje igual que cuando la HINI “no salgan”, es mas éstas fiestas Patrias no son en manera alguna para el pueblo…y la verdad no había necesidad de decirlo, pues nada en verdad tiene que festejar la población en general…
En fin, volvamos al paquete que se envió por el gobierno para festejar en casa el Bicentenario de la Independencia y grande ha sido la sorpresa de todos los que lo han recibido pues además de lo citado en el primer párrafo la cajita con el logo de la Presidencia de la República contenía tres estampitas policromadas de los héroes perinclitados de este sexenio Antonio López de Santana, Porfirio Díaz y Victoriano Huerta y al reverso de cada una leyenda “epónimos a quienes el régimen les rinde veneración ciega”…
Sorprendidos, nos cuentan los receptores de esta cajita conmemorativa, siguieron hurgando encontrando con estupor lo que a primera vista les parecieron fetiches, amuletos o talismanes para alguna suerte de magia, encanto o brujería, pero ya viéndolos bien, con cuidado y de cerca resultaron en miniatura figuras en bruñidos bronces alegóricos y que cito sin orden alguno, tal y como me fueron referidos y descritos:
Con un emblema de IMSS-SCT la hercúlea e ígnea figura de Molinar Horcasitas tendido como émulo del Pípila empuñando una antorcha frente a una guardería y como losa en la espalda pesados extintores contra incendio vacios con una etiqueta de instrucciones “úsese solo como objeto contundente en mítines de sobrecargos y/o de usuarios que pretendan abordar aviones en los hangares o cobrar el importe de los boletos vendidos” con astucia y visión empresarial ante el solo presentimiento de una quiebra…
Un pomo de vaselina “la trigarante” y la escultura a la cera perdida de Lujambio abrazando la “estela etérea del Bicentenario” sin cimentación ni luces adornada en el vértice con una veleta para medir y contabilizar los vientos para preservarla hasta el año 2,200, aunque en hoja anexa se aclara que se exigirá a los canadienses precisen si esas mediciones concluirán en la mañana o en la tarde y que incluyan información para poder calendarizar mejor los mega puentes escolares que nos merecemos mas allá de “héroes y de mitos”…
El Srio. de Educación quiso enviar un mensaje subliminal para el 2012 y citando a Bórges agregó a su estatuilla en su pequeño pedestal “no nos une hoy el amor sino el espanto ¿será por eso que los quiero tanto???
Gran pasmo y estupefacción inenarrable produjo en los receptores de la “caja de la inmortalidad” una lata de birria disecada de la legendario oveja clonada “Dolly” y en el fino estuche las siglas enigmáticas de la S.H.C.P y les causó extrañeza no encontrar aún la estatuilla del Sr. Cordero a pesar de la enorme sed de gratitud con los “héroes anónimos” pero encontraron en Monsiváis una posible explicación: “Los héroes nacerán por decreto el mismo día de sus hazañas para que sean padres e hijos de la patria al mismo tiempo y de manera súbita haiga sido como haiga sido, porque héroe que nace antes de sus hazañas se vería más obvia la imposición prematura y mayor el simple afán protagónico sin méritos ni virtud alguna que reconocerle…
Pero prematuros son ya los rechazos y en la reunión de familias a la que fuimos invitados por el Bicentenario alguien con sorna y gran rencor repetía… ese tal Cordero debía dar el grito de Dolores, pero por los tremendos dolores de cabeza que éste sujeto anodino le está causando a la frontera norte con el “SIAVE”, los abusivos aranceles estimados por personal corrupto en las aduanas y que impiden importar legalmente autos usados; pero como puñalada trapera a la economía de la región la absurda restricción de dólares para depósitos, otra idiotez trepidatoria y así espontanea, aturdidora surgió la rechifla recordando a la mamá “Dolly” del Secretario de marras…
Atropelladamente, arrebatándose la palabra todos los presentes querían narrar el contenido de la “Cajita del Bicentenario” enviada desde Los Pinos para festejar en casa para disuadirnos de no asistir a la fiesta del Zócalo y de otras plazas públicas, fiestas que se pagan con los impuestos de todos y en los que “La Inclita” Patricia Flores cuatacha de Calderón se gastó tres mil millones de pesos, así pues entre el repiqueteo de los call-centers que a todos nos hablaban para des invitarnos y la profusa propaganda de los personeros del régimen sugiriendo a la población ver la fiesta de Calderón y sus cuates por TV, alguien de los presentes sacó del fondo de la cajita de los héroes que cobran en la nómina sin dignidad una figurilla pétrea y la curiosidad al pasarla de mano en mano la pregunta era ¿Por qué en piedra y no bronce?
Lo extraño de esta estatuilla de Javier Lozano el del empleo virtual sub-mecatum (bajo cuerda) por razones que solo conoce el remitente no alcanzó la inmortalidad del bronce y viene labrada toscamente reproduciendo la figura de un verdugo medioeval con una guirnalda coronando sus sienes y las siglas “SME” así como dos conjuntos escultóricos de las bocas derruidas de las minas de Pasta de Conchos y Cananea y en la base del diminuto pedestal del conjunto escultórico en miniatura una enigmática frase en chino y ante las dudas de su significado uno de los presentes, un erudito por cierto, nos iluminó con la traducción: Si copelo… cuello solo a los sindicatos…
Al voltear la “cajita del Bicentenario” al revés una respetable señora hizo caer inopinadamente con el sonrojo en la cara dos objetos que rodaron estrepitosamente por el suelo, alguien caballeroso ayudó a levantarlas y pasaron de mano en mano, el primero era del “CISEN” con una grabación completa de los telefonemas que la señora descuidada había hecho desde su casa los últimos seis meses y una encuesta de GEA-ISA donde se plasman cifras generosas, no cuchareadas, del apoyo generalizado y entusiasta de la población hacia el “Príncipe Purépecha del desempleo”, esa misma señora sostenía en la otra mano trémula, con el rostro demudado por no entender el significado de una pluviómetro con las siglas “CNA” y una figurilla encogida como tratando de contener el agua de una presa con un “yunque” y los ojos vendados…
Murmullos y ojos desorbitados provocó entre todos los presentes cuando otra señora sacó de su caja del Bicentenario recibida ayer en su domicilio, una “Barbie” original con el logo de Mattel y una tarjetita con el nombre de Genaro García Luna a quien dijo la santa señora no tener ni idea de quien sea, pero pegada con diurex color canela la reproducción a escala de una AK-47 sobre la declaración de los derechos del hombre de la Revolución Francesa autografiada por F. Cassez y Sarkozy al alimón ¡Muy extraño resultó esto provocando encogimiento de hombros y cierto tartamudeo y balbuceos de algunos presentes por una extraña sensación de total inseguridad que recorrió el salón y el temor de ser allanado el lugar intempestivamente aunque solo fuera para un video-montaje!
Alguien desde el fondo del nutrido salón nos pedía atención y preguntando a todos los presentes ¿Ya vieron la réplica de la campana del Bicentenario? Al corroborar que a todos les llegó igual se vio que reproducía artísticamente una cabeza decapitada y como badajo una casco en miniatura para personal militar, pero no bien se hablaba de cada objeto recibido ya saltaba alguien con otra novedad enjundiosa por lo que no podía faltar en esa “Caja del Bicentenario” una versión actualizada del grito oficial que a la letra dice: “Viva la Guerra!; Viva mi lucha; Viva Iturbide, Viva la primera insurgencia desde el poder; Viva Santana héroe integérrimo del racionalismo que nos privó de la carga de tener que gobernar Texas, California, Arizona y Nuevo México”…
Cuando los ahí presentes seguíamos departiendo animosamente y éramos instados cordialmente por la familia anfitriona para ponernos de pie para entonar el himno nacional, con atiplada voz nos atajó una dama venerable que con su brazo en alto agitaba una hoja y a todos nos decía, como se les pudo pasar aquí en la “Caja del Bicentenario” viene ya la versión corregida del himno y en efecto al releerlo todos coincidimos que en la segunda estrofa (In-Fine) debe decir de aquí al 2012 “Un soldado en cada esquina y retén se te dio”…
Se departió alegremente, se saborearon exquisitos platillos y se escanciaron los vinos de la amistad, pero como si algo en el subconsciente provocara rechazo natural, nadie tocó los charales ni el charanda que algún despistado llevó a la reunión…
Después del grito en la tele un iracundo comensal de ésta grata reunión de familias propuso también el gozo de un segundo grito liberador (el primero había sido “Sálvese el que pueda”) y a plena voz que aun retumba en los ventanales del recinto y prorrumpió con un ¡Mexicanos… ya basta! ¡Abajo el mal gobierno!!! Que repitió hasta en tres ocasiones con frenesí y las carótidas saltadas en el cuello pero que con gran entusiasmo le fueron secundados entre aplausos y coros estruendosos por todos los presentes…
En las despedidas del convivio se escucharon propuestas, sugerencias e ideas en tropel para devolver a Los Pinos la “Cajita” del Bicentenario con sugerentes recados, objetos e impresos non-gratos como reclamo a los llamados a la dispersión y a la retracción para la “privatización” del festejo por parte de la élite enana y la lacra politiquera ante el temor, bien fundado por cierto, de alborotos, rechiflas y mentadas por el rechazo, el enojo y el hondo malestar ciudadano…
Aun no se dispersaban y algunos todavía de una acera a otra (en alta voz) se preguntaban ¿podría la Auditoria Superior de la Federación auditar algún día el “circo del autofestejo” y que el pueblo sepa el costo real del soberano camote del Bicentenario del derroche inicuo e inocuo y estructurado como otro gran montaje para el autoengaño de las élites abombadas… así terminó el festejo en casa con la cajita de Los Pinos y las miniaturas “colosales”.
Lo trascendente de esta y muchas otras reuniones familiares que se celebraron a lo largo y a lo ancho del país con motivo del Bicentenario es que independientemente de esa clase política con visión gerencial “teocrática, rígida y necia rebasada ya por la jerarquía militar” pervive y se fortalece el sueño original de los mexicanos que bien puede resumirse en “el imperio de las leyes; la redención de los oprimidos; la moderación de los poderosos; el combate a los abusivos y el anhelo renovado por un espacio para desarrollarnos, crecer y progresar en armonía”.
Solo los exiguos, medrosos y eunucos no supieron a tiempo poner un alto a los abusos y arbitrariedades del poder para volver al pleno respeto al Estado de Derecho.
Eso no es mucho pedir y no debe ser difícil de conseguir, solo se requiere que la población no pierda el oriente, se unifique, se organice, se rebele, proteste y exija de la autoridad orden, rendición de cuentas, seguridad elemental y total respeto a la ley.

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