PRESIDENCIA

de la República, la piedra angular carcomida de un “edificio” vetusto y fuente de todos los excesos, del autoritarismo y la impunidad…

Por: Lic. Ricardo Eguia Valderrama

Junio-27-2009

“…estábamos mejor, cuando

estuvimos peor”

La voz del pueblo

Un autor decía “…intrepidez, amor a algo superior y claridad de metas es lo que necesitan los pueblos del mundo para provocar un amanecer señalando con claridad su verdad para superar las tinieblas y el humo que oscurece la realidad por los intereses del grupo en el poder… y ceder así a la sublime tentación colectiva del heroísmo”

Así como la humanidad pasó del lenguaje gutural, fono-mímico y monosilábico a la articulación de las palabras y después al lenguaje; así como también en la escritura pasó de la piedra al papiro y del papiro al libro así hoy empieza a fermentar un movimiento de rechazo a las rutinas y dogmatismos políticos, para empezar a resistir la tiranía del engranaje nivelador, la coacción del autoritarismo impostor, la ineptitud gubernamental; el abandono y la perversión de la función pública; contra el crimen como una constante y haber hecho del país su campo de batalla, y contra procesos electorales manipulados desde el poder pisoteando la voluntad popular y de candidatos sin basamento social impuestos por las cúpulas es que hoy decía que se inicia un movimiento a favor de una sociedad mas participativa, demandante y en pie de lucha ante la grave crisis de representatividad…

Si bien es cierto, este movimiento apenas se inicia y aun no se decanta era ya impostergable porque si bien es cierto ninguna Democracia se construye destruyendo, tampoco y quizás nunca se logra con la pasividad o el inmovilismo, tampoco se avanzaba con las simples protestas ni solo con los discursos del hartazgo, tenía que desembocar como principio de un río de voluntades que se podrá tornar caudaloso si “prende” la urgencia de ejercer el derecho de votar racionalmente…

Ningún mexicano sensato quiere la violencia y por ello a pesar del desencanto que producen en casi toda la población los procesos electorales reducidos (por una clase política confrontada) a solo auténticos nudos gordianos y genuinos pugilatos precedidos de campañas emponzoñadas, bajunas, donde prepondera la víscera, el lodo, la burla y la difamación por carecer el partido del gobierno de propuestas valederas ante las graves crisis económica y de inseguridad, resulta ya impostergable que el país deba darse a si mismo una nueva oportunidad de cambios profundos utilizando la presión del voto…

Pero a pesar de la honorabilidad, indudable buena fe e independencia de criterio de las personalidades visibles y de los que encabezan este digno movimiento para sacar de su marasmo, inercias y contubernios lucrativos de algunos legisladores con los grupos de poder económico enquistados en las estructuras gubernamentales, empiezan a fulgurar por lo menos dos focos rojos que podrían dar al traste con este laudable esfuerzo ciudadano:

El primero y gran peligro que está cundiendo es el tremendo equívoco de anular el voto que si conocen bien el sistema electoral mexicano no importará al final del día las “montañas” de votos nulos para “sepultar” simbólicamente a los partidos pero que un solo voto emitido (mayoría relativa) por sus candidatos hará la diferencia y en nada modificará la futura composición de la Cámara de Diputados… ¡Esto es, con simbolismos no se derrotará a las burocracias atiborradas e insolentes, ni la llegada de legisladores improvisados, con credenciales forzadas o inventadas por los tradicionales poderes facticos! ¡Será un esfuerzo estéril y la sociedad se mostrará después mas irritada por esta nueva frustración! ¡El voto nulo no ayuda en nada!

El otro peligro que muchos observadores empiezan a detectar es el oportunismo de los medios monopólicos de la comunicación que están aturdiendo a la ciudadanía con esa clásica ponzoña telenovelera pagada torcidamente por el mismo gobierno y solo para defender sus cotos de poder… así mismo la grosera y cínica sobrepuja de Calderón para “montarse” ladinamente en este movimiento para cooptarlo, el cual por cierto empezó a cobrar fuerza desde aquel grito que interpretaba el hartazgo social de “si no pueden renuncien” y que esperamos no lo desnaturalicen ni se lo apropien para “desinflarlo” los mismos violadores del “Estado de Derecho” y los mismos que se oponen al rediseño del país o a la “Reforma del Estado” porque los promotores del voto nulo son enemigos de la “Revocación de mandato”, del referéndum para reformas Constitucionales o a la consulta directa a la ciudadanía…

Existe pues el grave riesgo de que la ciudadanía sea utilizada y engañada con la pretensión fantasiosa de que el voto nulo cambiará el batidero que entrampa al país y eso sería otra tragedia ciudadana al constatar pasadas las elecciones que nada cambió porque el poder se concentra en la voluntad de un solo individuo, el primero que debía estar acotado por la Ley pero que en este país es el único que hasta puede destrozarlo sin que se le pueda juzgar por nada.

Sería otra tragedia ciudadana cuando pasada las elecciones el Calderonato vuelva como hasta ahora a hojear lerdo su “manual del distraído” en el que ha perdido miserablemente el tiempo hundiendo al país con un decrecimiento económico nunca antes visto de menos ocho puntos del PIB y con el mas brutal desempleo…

Pero si eso es ya una tragedia, el hecho de que el panismo torpe e incompetente haya llegado al poder, si obtuviera con la ayuda del voto nulo una mayoría en la Cámara de Diputados implicaría una catástrofe para el país ya que en principio se redoblaría la deleznable manipulación y el majadero desdén presidencial por el Congreso de la Unión aplazando la fundamental “Reforma del Estado” que acotaría ese sistema presidencialista desequilibrado el cual aun cuando se aprueben leyes por el Congreso el utiliza nefando el “veto de bolsillo” otra argucia metaconstitucional del presidencialismo monárquico envuelto en ropajes seudomocráticos…

Es un hecho lamentable y a nadie escapa una aplastante realidad: En México no existe un elemental equilibrio de poderes y está enraizado y entronizado el más pernicioso presidencialismo absolutista, violento y radicalizado que ante su debilidad de origen se refugió en el Ejército exponiéndolo anti-constitucionalmente en las calles…

¡El extremismo obsesivo de Calderon por militarizar al país y utilizar el poder y las Instituciones de la República contra el pueblo y para pisotear la autonomía de los Estados equivale ya a un golpe de Estado!

Pero después de casi tres años de ensangrentar con casi doce mil muertes violentas en las calles no ha disminuido un ápice el narcotráfico, ni el consumo, ni el trasiego de drogas teniendo que callar la población por el temor y la anarquía sembrada desde la Presidencia de la República que está utilizando la PGR como ariete politiquero nefando y las mismas policías infiltradas por el narco para violar las garantías ciudadanas y también para pisotear el proceso electoral en las entidades gobernadas por la oposición.

Esto es, se ha exacerbado la violencia del gobierno centralista con el pretexto del narcotráfico y avasalla, regaña, intimida, grita, amenaza a los gobernadores de oposición prohijando irresponsablemente la anarquía con graves riesgos de desestabilización en esa obsesiva locura Calderoniana de agandallarse como en el 2006 las elecciones de Julio próximo…

¡Debe recapacitar la población y no dejarse engañar con esa machacona, estereotipada, y burda campaña en los medios de la “República spotera” y sus cabilderos radiales para engatusarle con el “voto nulo” o en blanco como supuesto instrumento de milagrería para que las políticas públicas cambien en este país!

Hay que reflexionar para que no les refrieguen en la cara el mismo “haiga sido, como haiga sido” soberbio, prepotente y desfachatado con el que se inició marrulleramente este sexenio…

¡Debemos votar por la paz social y no por más violencia irracional!!! ¡Entre los extremos del abstencionismo y el voto nulo o en blanco está el voto razonado por aquellos candidatos que representan una posibilidad de regresarle al Congreso su función de legislar consultando a la población y no solo legisladores sumisos agachones y lacayos del presidente que se esmera en enlodar la majestad del diputado deturpándolo por no hacer sus caprichos y aprobarle en automático todo y hasta la ignominia, aunque el país estalle por tanta transa!

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